sábado, 6 de agosto de 2011

ARENGA AL SILENCIO DEL FUTURO

ARENGA AL SILENCIO DEL FUTURO

Las hojas me susurran una historia desconocida.

La luz del sol no es sabia ara todos los espíritus.

La realidad es imperceptible para los que gozan de escamas.

No es malevolencia del fuego de los guijarros,

bruñir a la conciencia de los pavos reales.

De los maricas que hicieron de mi tierra, su paraíso.

De los que extinguieron el trigo con falsas promesas,

para saciar la sed con colorantes, saborizantes y químicos.

Lloro cual antorchas que conocieron mejores tiempos.

Me siento inestable frente a la incertidumbre el futuro.

¿Pagaremos impuestos, sobre el derecho a la vida?

¿Cómo perciben la vida, los engendradores de los magnicidios?

¿Por qué no le inyectan cianuro, a la droga decomisada?

¿Será que la represión genera, el lucro de las ratas?

Los vientos dispersan los gritos de auxilio.

El infierno es el fin, sino el comienzo para algunos.

Sólo justificó las tempestades del corazón

y la inteligencia que construye: ¡sueños con fragmentos!

¿Por qué se vencen los espíritus, a los vicios?

¿Por qué nos dejamos estrangular, por absurdas normas?

¿Será que la conciencia los militares, es imbécil?

¿Será que nuestro futuro depende, del pensamiento de mulas?

Nacemos marcados cual ganado y como tal, nos comportamos.

Los senadores no son más que insaciables lobos ejecutivos.

Me es indiferente la suerte de las republiquetas y del dinero.

¿Cuánto abuso puede tolerar, un eunuco?

Los versos no pueden renunciar a luchar cual tártaros

ni las mujeres se deben conformar, como ostras preñadas con perlas.

La oscuridad de la noche edifica a muchos espíritus.

No sugiero destronar con violencia a los matarifes sacrificadores.

La guerra arrasa más que las pestes o el odio.

Despojémonos de las corazas y embistamos a los cazadores.

Confeccionemos banderas entre bastidores

y evitemos la destrucción del mundo, que vivirán nuestros nietos.

Héctor “el perro vagabundo” Cediel

2009-11-30

hectorcediel@gmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario